Hay un novedoso juego de cartas titulado Aquí viene la troika, que se vende ya en algunas tiendas de Lisboa, y que, en resumen, consiste en lo siguiente: los jugadores tratan de poner a buen resguardo los millones adquiridos gracias a sus influencias, intentan ganar elecciones y prueban a ponerse a salvo antes de que una carta maléfica aparezca en la mesa y lo desbarate todo: la de tres hombres de negro con cara de pocos amigos, la troika, que se queda con todo. Y hay un anuncio de una nueva tarjeta de crédito que permite fraccionar el pago de las compras navideñas en tres meses que ha sido reproducido en los paneles en los centros comerciales y que reza irónicamente: “Como se entere la troika…”. Es decir: que no sepan que a pesar de todo nos gastamos el poco dinero que nos queda (o que nos prestan).
Son constantes los chistes y las bromas en Portugal para conjurar la asfixia económica y vital. Porque serán unas vacaciones duras. Los funcionarios no tienen paga extra de Navidad y en enero, además, comenzarán a aplicarse las nuevas normas y recortes del presupuesto de 2013, el más polémico y restrictivo de la historia reciente del país, que prevé una brutal subida de impuestos equivalente, de media, a la retirada de un mes de salario.
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Inversiones
Un país en venta
Portugal termina el año con una ola de privatizaciones que incluye la de la TAP (la aerolínea portuguesa), la RTP (Radiotelevisión Portuguesa) y la ANA (compañía que se ocupa de la gestión de los aeropuertos). Está previsto que el Gobierno de Lisboa también culmine la privatización de los astilleros Viana do Castelo, faltando por determinar si pasará a formar parte del grupo brasileño Rio Nave o de los rusos RSI Trading.
Únicamente un comprador, el magnate colombiano-brasileño Germán Efromovich, ha ofrecido 350 millones de euros por la TAP, sobre la que pesa una deuda de 1.200 millones de euros. El Estado portugués (que percibirá solo un 10% de dicha cantidad) hará pública su decisión sobre la venta el 20 de diciembre. El director de Jornal de Negócios, Pedro Santos Guerreiro, opina que
El Estado ha caído en la trampa: únicamente un comprador y sin tiempo para poder hacerlo mejor. [...] Todo el dinero que Efromovich ofrece se gastará ‘dentro’ de la TAP. [...] El Estado, que hace entrega de la empresa, no recibirá nada o casi nada a cambio.
Hay cuatro consorcios que pujan por hacerse con Aeroportos de Portugal (ANA) en una competencia que también resulta polémica. “El francés Vinci ha ofrecido 3.000 millones por ANA", informó Jornal de Negócios.
En lo que respecta al ente de radiotelevisión estatal, Expresso explica que "el Gobierno puede seguir tres modelos con la RTP": que se mantenga como una concesión de gestión privada; una privatización del 49% del capital, con el compromiso de que la dirección cooperará con el operador privado; o una reestructuración. Al parecer, el Gobierno se inclina más por la privatización, o así al menos lo señala el semanario, que añade que el asunto se dirimirá antes de que acabe el año. Hasta ahora, el único comprador potencial es el grupo angoleño Newshold, dueño del semanario portugués Sol y uno de los propietarios del grupo de comunicación Cofina.
En diciembre de 2011, el Gobierno portugués vendió la mayor parte de su participación (el 21,3%) de la compañía eléctrica más importante del país (EDP) a la empresa pública china Three Gorges, por valor de 2.700 millones de euros.