Noticias Detención de Mladić
Preparativos para la inhumación de 775 cuerpos, en el cementerio de Potočari, cerca de Srebrenica, en julio de 2010. 15 años después de la masacre.

La vergüenza no se borrará

Si en general la prensa europea ha acogido con satisfacción la detención de Ratko Mladic, las reacciones varían según la implicación de los distintos países en la guerra de Bosnia.

Publicado en 27 mayo 2011 a las 15:11
Preparativos para la inhumación de 775 cuerpos, en el cementerio de Potočari, cerca de Srebrenica, en julio de 2010. 15 años después de la masacre.

Así,en la Gazeta Wyborcza, el antiguo disidente Adam Michnik afirma que la detención de Mladic “representa simbólicamente el fin de las sangrientas guerras de los Balcanes” y que constituye un mensaje muy importante para Europa: “la crueldad y la ignominia no quedarán impunes”.

En lugar de publicar, como la mayor parte de los periódicos, el retrato del “verdugo de Srebrenica”, Libération opta por llevar en portada su obra, mostrando una sobrecogedora foto de una fosa común descubierta en 1996 en la granja de Pilica, cerca de Srebrenica, un año después de la masacre. En las páginas interiores,el editorialista Vincent Giret lo celebra:

“Hay días como el 26 de mayo de 2011 en que no hay que perder toda esperanza puesta en Europa. Debemos a la Unión, a su modelo, a sus valores de justicia y de libertad, a su fuerza de atracción y al empeño de sus diplomáticos la detención del mayor criminal europeo desde la Segunda Guerra Mundial”.

Giret alaba la “intransigencia” de Bruselas frente a Belgrado — no habría negociaciones de adhesión sin su cooperación con el Tribunal Penal de la antigua Yugoslavia (TPY):

Recibe lo mejor del periodismo europeo en tu correo electrónico todos los jueves

“Esta intransigencia en nombre de los valores ha surtido efecto, conjugando la fuerza de atracción de la Unión y la impaciencia de este pueblo de sumarse algún día al envidiado círculo de los Estados miembros de derecho. Obsesionados por la amenaza de la decadencia, los europeos tienen tendencia a olvidar esta verdad que los serbios nos recuerdan con brío: el “modelo europeo” se constituye la referencia última de todos aquellos que aspiran a tener desarrollo y libertad”.

Por el contrario, Adriano Sofri en La Repubblica rememora que esta misma Europa

“dejó que la violencia, la infamia y las atrocidades se perpetrasen, e incluso en ocasiones las fomentó y las apoyó, sea por interés o por cobardía. Es francamente difícil calificar la captura de Mladic como un éxito de Europa: vale más decir que atenúa la vergüenza.

En Bruselas, De Standaard se posiciona desde el sentir de las víctimas de Mladic, y en particular del de las viudas de los miles de hombres masacrados por sus hombres. Como Haditza, con quien el periodista de opinión Bart Beirlant se encontró en aquel entonces:

“La detención de Mladic en Lazarevo – ya rebautizado como el Abbottabad serbio – es antes que nada importante para las numerosas Hatidza de Srebrenica, de Sarajevo y de otros muchos lugares de Bosnia. Para ellas, saber que el principal culpable de la muerte de sus maridos e hijos estaba todavía en libertad resultaba una idea insoportable”.

No obstante, también subraya que la detención de Mladic constituye

“Un mensaje para los dictadores de Oriente Medio, como el presidente sirio Bachar el Asad y el líder libio Gadafi, que creen poder matar sin ser castigados. Hemos dejado atrás la era de la impunidad”.

En los Países Bajos, donde los cascos azules eran los responsables de la seguridad de la “zona protegida” de Srebrenica en el momento de la masacre, la detención de Mladic está revestida de una “particular importancia”, tal y como explica Paul Brill en el Volkskrant:

“Él comandaba las tropas que tras la caída de Srebrenica deportaron y mataron a alrededor de 8.000 musulmanes. Fue el hombre que ridiculizó al contingente holandés, totalmente superado”.

Brill recuerda sin embargo que

“Los Países Bajos han desempeñado un papel activo [en la presión internacional], al recalcar sin cesar la necesidad de una mayor cooperación por parte de Serbia con el TPY y al establecerla como una de las condiciones de las negociaciones para la adhesión a la Unión Europea con Belgrado”.

En los próximos días, Mladic deberá ser trasladado a La Haya para ser juzgado allí. Pero, según el diario de Praga Hospodářské noviny, sería mejor que “el proceso tuviese lugar en Belgrado, y que el veredicto fuese emitido por los serbios”, con el fin de que estos “pudiesen hacer frente a su propia historia”.

Tal y como lo subraya también su homólogo, el Mlada Fronta DNES, “veinte años después del comienzo de la guerra en la ex-Yugoslavia, los serbios no quieren saber nada más de combates o de culpabilidad”. Los serbios se acercan a Europa, escribe el diario:

“Pueden viajar a Europa sin necesidad de visado. En el plano económico, el país también ha hecho progresos. Por contra, en lo relativo al diálogo sobre la guerra y sobre su responsabilidad, será necesario esperar a las próximas generaciones”.

Tags
¿Te ha gustado este artículo? Nos alegra mucho. Se encuentra disponible para todos nuestros lectores, ya que consideramos que el derecho a la información libre e independiente es esencial para la democracia. No obstante, este derecho no está garantizado para siempre, y la independencia tiene su precio. Necesitamos tu apoyo para seguir publicando nuestras noticias independientes y multilingües para todos los europeos. ¡Descubre nuestras ofertas de suscripción y sus ventajas exclusivas y hazte miembro de nuestra comunidad desde ahora!

¿Eres un medio de comunicación, una empresa o una organización? Consulta nuestros servicios editoriales y de traducción multilingüe.

Apoya el periodismo europeo independiente

La democracia europea necesita prensa independiente. Voxeurop te necesita a ti. ¡Únete a nosotros!

Sobre el mismo tema