El 15 de octubre, el ministro francés de Economía, Michel Sapin, envió a la Comisión Europea el proyecto de presupuesto de Francia para 2015. Para perjuicio de los demás miembros del Eurogrupo ( a excepción probablemente de Italia), Francia no respetará las normas presupuestarias de referencia de la zona euro. Así, el déficit se acercará al 4,3% del PIB en lugar del 3%, y la deuda representará el 95,1% del PIB, en lugar del 60%...
La Comisión Europea rechazará este proyecto casi con total seguridad. Si Francia se niega a realizar ajustes, la UE podría imponer una multa de hasta 4.000 millones de euros. El primer ministro Manuel Valls ya ha hecho saber que su Gobierno se atendrá a la propuesta de presupuesto, sea cual sea la decisión de la Comisión.