El caso ha causado una gran conmoción en Suecia. Este 18 de octubre se tiene que haber iniciado en Addis Abeba (Etiopía), el proceso de los dos periodistas suecos acusados de terrorismo. Y “a causa de juegos políticos, los suecos se enfrentan a 40 años de prisión”, anuncia con preocupación el Svenska Dagbladet, que señala que “Etiopía quiere dar ejemplo”. Johan Persson y Martin Schibbye fueron arrestados el 1 de julio cuando llevaban a cabo una investigación sobre las actividades petrolíferas y las violaciones de los derechos humanos en Ogaden, una región en la que ayudaron al Frente para la Liberación Nacional de Ogaden (FLNO). Las negociaciones para su liberación han estado dirigidas por el ministro de Asuntos Exteriores sueco, Carl Bildt.
Antiguo miembro del consejo de administración de Lundin Petroleum, una empresa petrolera con intereses en Etiopía, Bildt ha sido muy criticado por su falta de compromiso con los dos periodistas. "Nuestro ministro de Asuntos Exteriores suele hablar mucho, pero en realidad deja mucho que desear", comenta el Svenska Dagbladet, que también plantea varias preguntas: "¿Qué quieren decir realmente los discursos suecos sobre derechos humanos y todos esos millones de coronas del contribuyente para la ayuda en Etiopía? Si no estamos dispuestos a luchar por la libertad de prensa y la vida de los dos periodistas suecos, de forma clara y combativa, ¿qué nos quedará como motivo de orgullo?”