Hasta ahora, la CIA obtenía datos bancarios europeos por cauces ilegales. Sin embargo, dentro de muy poco, “la UE brindará a Estados Unidos gran transparencia en lo que respecta a las operaciones financieras de sus ciudadanos”, informa Spiegel-Online. La edición electrónica del semanal resume esta práctica adoptada tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. Así, la CIA ha presionado a la filial estadounidense de SWIFT, sociedad con sede en Bélgica y que reúne a ocho mil bancos de todo el mundo. Este proveedor de servicios financieros gestiona a diario millones de operaciones y la CIA ha utilizado millones de datos bancarios para luchar contra el terrorismo.
Desde el 2006, Bélgica animaba a SWIFT a impulsar sus agencias en Europa para cerrar su filial estadounidense a finales de 2009 y escapar, así, a la influencia de la CIA. Sin embargo, tal y como explica Spiegel-Online, Estados Unidos ha presionado tanto a los ministros europeos de Interior que éstos están dispuestos a alcanzar un acuerdo con Washington el 30 de noviembre, víspera de la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, que permitirá a los diputados europeos —en su mayoría hostiles a este proyecto— presentar su veto.