Rumanía y Turquía trabajan en la puesta en marcha de la reforma de la concesión de visados para turistas y empresarios turcos. El tiempo de espera para conseguir un visado quedará reducido a 10 días. Esta medida, que los presidentes turco y rumano, Abdullah Gül y Traian Băsescu, acordaron en marzo, se hará efectiva antes de finales de mes, explica Românialiberă. El diario concreta que
En un futuro muy cercano, los turistas turcos (así como, dentro del mismo paquete de medidas, quienes provengan de los países árabes del Golfo Pérsico o de China) no tendrán que hacer meses de interminables colas para conseguir un visado para Rumanía.
Bucarest desea también que se permita un visado de 5 años para los empresarios turcos. Citando al ministro turco de Asuntos Exteriores, România liberă recuerda que Turquía es el único país a cuyos ciudadanos se les exige visado para entrar en la Unión a pesar de haber firmado una unión aduanera con la UE. Bajo este punto de vista, "Rumanía representa una solución para la concesión de visados a los turcos", pero una solución parcial puesto que no pertenece al espacio Schengen. Salvo que Holanda ejerza su derecho a veto, su incorporación al mismo podría aprobarse el próximo septiembre.