En el informe entregado ayer a la comisaria europea para la Agenda Digital, Neelie Kroes, un grupo de expertos de alto nivel que ha analizado el pluralismo de los medios de comunicación en Europa aconseja, entre otras medidas, que la Unión Europea disponga de más competencias para hacer que la libertad de prensa se respete en todos los Estados miembros y en Internet.
El informe aprovecha para criticar la situación de los medios de comunicación en Hungría, pero también hace referencia a Francia y a Italia, y propone armonizar las legislaciones nacionales (en particular las que se ocupan de la protección de datos y la difamación) puesto que los medios de comunicación europeos se mueven en un ámbito que carece de fronteras.
“Hay serios motivos como para que la UE revise la protección de la libertad de prensa y del pluralismo”, valora Financial Times:
Algunos de los últimos miembros que se han adherido, especialmente Hungría, han adoptado recientemente medidas que perjudican muy seriamente la independencia de la prensa. Pero existe una contradicción entre querer defender este principio fundamental y otorgar más poderes sobre los medios de comunicación europeos a Bruselas. [...]
Conceder a la Comisión la supervisión de los reguladores de los medios de comunicación supone abrir la puerta a una nueva forma de injerencia, que en este caso sería ejercida por Bruselas. […] Hay métodos mejores para garantizar que los reguladores de los medios de comunicación no sean meras marionetas de los Estados. La Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, que exige que los Estados miembros respeten la libertad de prensa y el pluralismo, está en vigor desde 2009 y sus violaciones pueden someterse a un proceso judicial. Los retos que plantean países como Hungría demuestran que se necesitan métodos más eficaces para disuadir a los Gobiernos de que retrocedan en materia de derechos democráticos. Europa sufre por no disponer de un abanico de respuestas graduadas según el tipo de violaciones cometidas, como el bloqueo o la retirada de ciertos fondos si los Gobiernos se pasan de la raya […]. En cualquier caso, el camino para garantizar una prensa libre y activa no es hacer que Bruselas se convierta en el nuevo capataz de los medios de comunicación.Recibe lo mejor del periodismo europeo en tu correo electrónico todos los jueves