El programa de ayuda financiera a la banca española podría prorrogarse más allá de la fecha prevista para que expire, el 31 de diciembre de 2013, para asegurar una "red de seguridad financiera".
Esta posibilidad "permitiría disipar incertidumbres cuando afloren las nuevas necesidades de capital", recoge El País, en el caso de que una exhaustiva evaluación de los bancos europeos realizada por el BCE, prevista para primavera de 2014, indique que la banca española así lo requiera.
España ha solicitado 41.000 millones de euros de los 100.000 previstos hace un año por la troika (UE-BCE-FMI), el Gobierno español estudia esta opción de la extensión como "modo de dique de contención", solo si, según El País:
los efectos balsámicos derivados de esa especie de seguro superan el estigma político asociado y siempre que los socios [de España] más reacios no pidan contrapartidas inaceptables.