Según un informe de la OCDE sobre los “mitos de la inmigración”, un país puede muy difícilmente escoger a sus inmigrantes. En un momento en el que todos los gobiernos quieren atraer a los mejores inmigrantes, a los altamente cualificados y capaces de suplir cualquier carencia de mano de obra local, “los países únicamente pueden seleccionar a una ínfima parte de sus inmigrantes”, explica Die Presse. En Austria, precisa el diario:
dos tercios de los inmigrantes proceden de la UE - un espacio incontrolable – por la libre circulación de personas. El 11% se deben a inmigración humanitaria, que tampoco se puede limitar por respeto a las convenciones de Ginebra. El 21% de los inmigrantes se encuadran dentro del reagrupamiento familiar. [...] Únicamente los inmigrantes que proceden de terceros países y vienen para trabajar pueden ser seleccionados, pero solo representan el 2% de los inmigrantes que se instalan de manera permanente en Austria.
Este problema no es exclusivo de Austria, añade Die Presse, puesto que “incluso los países más selectivos como Australia o Canadá, no consiguen seleccionar más que a un cuarto de los inmigrantes que trabajan en su país”.