Tras meses de lucha industrial y familial, Volkswagen volverá a comprar Porsche. Las dos marcas, como las familias que las dirigen, "están emparentadas", recuerda el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung. "En las fotos antiguas, se ve la similitud" : el Escarabajo , "un honrado animal de trabajo" y el Porsche, construido sobre las mismas bases "pero icono de una República joven y hedonista". Tras la separación de las dos filiales familiares, Ferdinand Piëch se habría tomado mal la pérdida del prestigioso nombre de Porsche. Al convertirse en jefe de VW, habría " porscherizado" todo. "Adquirió al constructor Bugatti, desarrolló los ‘Quattro’ y los ‘R8’… Todos estos vehículos parecían gritar: ‘Miren, ¡puedo hacer un Porsche !’ ".
A partir de ahora, como soberano de las dos marcas, Piëch podrá expresar "su segunda máxima: desarrollar esa alta tecnología ecológica que el consumidor desea comprar", comenta el periódico. En cuanto a Wendelin Wiedeking, el jefe depuesto de Porsche, habría adquirido piezas de un fabricante de calzado. "Sandalias en lugar de inyección directa, del carril de aceleración al camino de senderismo: como un cuento de hadas estival en la era del cambio climático", resume FAZ.